Petén
El Petén es un vasto territorio de sabanas , pantanos y selvas tropicales. Se extiende . desde el sur de México, el área del Lacadón, hasta las montañas del norte de Belice. Es una gran reserva de vida salvaje, parte del territorio permanece virgen, con viejos árboles como ceibas y caobas. Su extenso territorio está considerado como uno de los pulmones del planeta, debido a su exuberante vegetación.
El departamento cuenta en la actualidad con varias zonas protegidas, como la Reserva de la Biosfera Maya, con más de un millón de hectáreas de bosque subtropical húmedo. Flores, es la capital departamental de El Petén, asentada en una pintoresca isla lacustre. En El Petén, además del Parque Nacional Tikal, se localizan otros sitios arqueológicos de interés, como Uaxactún, Dos Pilas, Yaxhá y Topoxté.
El departamento cuenta en la actualidad con varias zonas protegidas, como la Reserva de la Biosfera Maya, con más de un millón de hectáreas de bosque subtropical húmedo. Flores, es la capital departamental de El Petén, asentada en una pintoresca isla lacustre. En El Petén, además del Parque Nacional Tikal, se localizan otros sitios arqueológicos de interés, como Uaxactún, Dos Pilas, Yaxhá y Topoxté.
Tikal:
Al norte del departamento de El Petén, a 65 Km. de la ciudad de Flores. Es parte de la Reserva de la Biosfera Maya. Con una superficie de más de 57.600 hectáreas, el Parque está cubierto casi en su totalidad por bosques maduros con gran cantidad de especies vegetales, muchas de ellas amenazadas como el cedro y el caoba.Tikal, no solamente es refugio de la mayor parte de mamíferos de Guatemala, sino uno de los lugares que permite observarlos con más facilidad. Los monos araña y los monos aulladores o zaraguates no pasan desapercibidos para el visitante, quien con un poco más de suerte podrá observar también pizotes, mapaches y venados de cola blanca. Desde las áreas abiertas al público, los encuentros con pumas y jaguares son improbables.
En el parque se han registrado más de 300 especies de aves, que van desde colibríes, hasta enormes aves de presa. Los reptiles, en particular, las serpientes, son también abundantes. El interés primordial del área consiste en el ensamble que forma el entorno natural con los vestigios arqueológicos de la antigua ciudad.
Tikal fue quizás el centro urbano más importantes del área maya de su tiempo. Se accede a través de una carretera asfaltada de 65 Km. comunica al parque con la Ciudad de Flores. La distancia es recorrida por microbuses de turismo y otros autobuses con regularidad. Tikal es una de las áreas protegidas mejor servidas. Dispone de dos museos, senderos interpretativos, visitas guiadas, servicios sanitarios, áreas de acampar, hoteles, restaurante y tiendas de recuerdos. Es una de las primeras áreas protegidas de Guatemala y el único lugar en el mundo que ha sido declarado a la vez Patrimonio Cultural y Patrimonio Natural de la humanidad por la UNESCO.
La ciudad de Tikal, fue uno de los grandes centros de la cultura Maya y llego a tener una población de 60.000 habitantes alrededor del año 150 d.C. Durante mucho tiempo Tikal permaneció sepultada bajo la vegetación, y hoy forma parte de uno de los parques nacionales de Guatemala: el Parque Nacional Tikal. En todo el conjunto pueden verse mas de 3.000 construcciones dispersas en unos 16 Km. cuadrados. El turista podrá apreciar desde palacios y templos monumentales hasta terrazas, residencias, altares de piedra y muchas otras joyas del legado Maya.
Tikal esta considerado uno de los centros arqueológicos mas importantes del mundo. Su impresionante Plaza Mayor, en medio de una exuberante vegetación y variedad de fauna, abre la puerta al visitante para un viaje al pasado y al corazón del enigma Maya que, por sus cualidades culturales y naturales.
En 1848 el Coronel Modesto Méndez y Ambrocio Tut, Corregidor y Gobernador de Petén respectivamente llevaron a cabo el primer reconocimiento del lugar oficialmente.
A la fecha el área mapeada es 16 kilómetros aproximadamente y en ella se encuentran más de 4,000 estructuras de diferente índole. Las primeras evidencias de ocupación del lugar se remontaron aproximadamente al año 800 a.C. dentro del periodo preclásico Medio. Las últimas construcciones encontradas corresponden al período Clásico Tardío (900 años d.C.).
Estos 1,500 años consecutivos de ocupación contribuyeron a alcanzar a un alto desarrollo cultural, artístico, arquitectónico, urbanístico, matemático, astronómico, agrícola y comercial. Esto ha sido motivo de admiración e interés científico internacional.
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